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INSTRUCCIONES PARA LA MISIÓN - Mateo 9: 35- 10:8

Foto del escritor: sinodoipvsinodoipv

Litúrgicamente nos encontramos en época de Pentecostés, celebrando el derramamiento del Espíritu Santo, la manifestación de su presencia a través de los dones y el impulso que da a la misión de la iglesia.


Nos cuenta el Evangelio, que Jesús recorría los pueblos y aldeas y en su caminar, vio que la gente andaba como "ovejas sin pastor". Encontramos que según el idioma original, está expresión la podemos entender como: postrada, saqueada, indefensa. De esta manera, en forma indirecta, Jesús le está haciendo un reclamo a los líderes religiosos de su época. ¿Cómo es posible que el pueblo haya llegado a tal estado de postración, sin que ustedes, hagan algo a su favor?


Hoy sucede algo similar, la humanidad vive en situación parecida de desesperanza, desorientación, pobreza, abandono, acciones de racismo, de violencia y de muerte. El reclamo de Jesús al liderazgo de aquel tiempo, trasciende y se hace pertinente también, para el liderazgo político y religioso en la actualidad.


Ante un panorama tan desolador, nos preguntarnos ¿qué es lo que cada creyente que ha decidido seguir a Cristo, cada comunidad de fe y su liderazgo, necesita para asumir el llamado, el envío y emprender la misión?


La respuesta del Evangelio para hoy, es contundente. Necesitamos ver con la mirada de Jesús, para poder sentir lo mismo que Él sintió. Tal como Jesús tenemos que sentir COMPASIÓN.


¿Pero qué es la compasión, cómo la podemos definir? La compasión es mucho más que sentir lástima ya que, la compasión nos mueve actuar a fin de transformar la situación, nos impulsa a transformar vidas y realidades.


Hay un refrán popular que dice: "Ojos que no ven, corazón que no siente". Sin embargo, hoy les invito a que hagamos el ejercicio de invertir este refrán de la siguiente manera" "Ojos que ven, corazón que sí siente". Es decir, salir de nuestro propio encierro y recorrer pueblos y aldeas como lo hacía Jesús para conocer la realidad en que vivimos.

Al conocer nuestra realidad, surge un segundo interrogante: ¿Cuál es el mensaje o buena noticia que tenemos para anunciar y compartir a la humanidad?


Este mensaje no puede ser otro que el mismo mensaje que Jesús predicó y vivió: el mensaje del Reino de Dios, que se define como un proyecto concreto de amor, justicia y paz para toda la humanidad y que incluye también a la creación entera.


Sabemos y Jesús también lo sabía, que es grande y nada fácil el trabajo que hay que realizar. Es por eso que el mismo Jesús, nos pide que roguemos al Padre, quien es el gestor de la misión, que envíe obreros y obreras para desarrollar la misión. Notemos que no dice pastores o pastoras en el sentido clásico de una función cotidiana de cuidar rebaños de ovejas, como profesión sino, hace mención a obreros y obreras. Es decir, que amplía la labor y por eso, todos somos llamados y llamadas a dar nuestro aporte independientemente de la labor que realicemos. Por lo tanto, además de pedir obreros, necesitamos ofrecernos como trabajadores del reino.


A la luz de esta porción del Evangelio, surge un último interrogante: ¿De qué manera debemos desarrollar la misión?


Es en este contexto, que me permito resaltar las siguientes instrucciones que dio Jesús a sus discípulos según el relato de Mateo:

1. La centralidad del mensaje del Reino de Dios. ¿Conocemos su significado e implicaciones?

2. Promover la sanidad integral de las personas, espiritual, física, social y ecológica. ¿Esto se ve reflejado en el plan de acción de nuestra comunidad de fe?

3. Proclamar la gratuidad del mensaje del Señor. Mensaje que no se puede vender ni comprar porque es un regalo de Dios. Esa gracia nos impulsa a servir como obreros y obreras sin interés de lucro. ¿Evitamos promover la mercantilización de la fe y de nuestra práctica religiosa?

Pidamos a Dios sabiduría y poder del Espíritu Santo, para comprender, vivir y promover su Reino, hoy cuando más necesitamos de su gracia, misericordia y paz.

¡¡¡A DIOS SEA LA GLORIA!!!l

Rev. Uriel Ramírez

Guarenas, Edo Miranda Venezuela




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