top of page

LA MUERTE DE JUAN EL BAUTISTA Marcos 6:14-29

Foto del escritor: sinodoipvsinodoipv




Marcos introduce su relato con los temores y remordimiento de Herodes por haber asesinado a Juan el Bautista, ante la fama y los poderes milagrosos de Jesús, quien ya era notorio. Herodes piensa que Jesús es Juan el Bautista resucitado ¿Qué nos dice esto de Jesús?

En el relato de Marcos sobre esta muerte, hay varios personajes importantes: 1) Juan el Bautista; 2) Herodes Antipas, Gobernador de Galilea, Tetrarca; 3) la Princesa Herodías, mujer de Herodes; 4) Salomé, hija de Herodías e hijastra de Herodes (hija de Felipe, hermano de Herodes). Veamos cómo se sucede este horrible crimen.

1. Herodes echó preso a Juan el Bautista por presión y exigencia de su mujer, Herodías. Esto, debido a que ésta estaba llena de ira contra Juan porque él había actuado, según ella, en su contra. Juan encaró a Herodes para señalarle que no estaba bien y, que era un pecado, el que él hubiese tomado por esposa a la mujer de su hermano Felipe. De

ahí la rabia y odio que se generó en Herodías. Ésta quería la muerte de Juan, pero no hallaba cómo lograrlo. Evidentemente Herodes era un hombre débil, que se había dejado llevar por pasiones para hacer suya indebidamente a esta mujer casada con su hermano. Ahora, dominado por su mujer fue incapaz de actuar con rectitud y justicia y se dejó llevar por Herodías y puso a Juan en la cárcel.

2. Herodes, a pesar de tener a Juan en la cárcel, lo oía y escuchaba con admiración sus palabras, aunque se quedaba muy perplejo; sabía que Juan era un hombre justo y santo, y lo protegía, pero lo mantenía preso.

3. Llegó la oportunidad para que Herodías eliminara a Juan. En la ocasión de su cumpleaños, Herodes organizó una fiesta y ofreció una cena a sus príncipes y tribunos y a los altos dignatarios de Galilea. Mientras todos comían y bebían entró en la escena Salomé, la hija de Herodías, la cual bailó una erótica danza, que ha sido llamada “la danza de los siete velos”, danza que agradó a Herodes y a sus invitados, a tal punto que Herodes le dijo a la muchacha: “Pídeme lo que quieras y yo te lo daré”, y le juró: “todo lo que me pidas te lo daré, hasta la mitad de mi reino”.

4. Ante esta oferta por parte de Herodes, Salomé acudió a su madre para indagar de ésta lo que debería pedir. Herodías había encontrado la excusa perfecta para eliminar a Juan. “Pide la cabeza de Juan el Bautista”. La muchacha pidió a Herodes la cabeza de Juan y éste, a causa del juramento y de los comensales que eran testigos de tal juramento, procedió a ordenar la decapitación. La cabeza del Bautista le fue entregada a Salomé en un plato y ésta la llevó hasta su madre.

5. ¿Qué tenemos aquí? Un vil crimen urdido por una mala y viperina mujer y llevado a cabo por un Tetrarca débil, falto de toda moral y pésimo gobernante. La oferta de darle y jurarle a la bailarina lo que ésta pidiera, hasta la mitad de su reino, fue una oferta irresponsable, probablemente ilegal y ciertamente indigna de un gobernante, hecha además en medio de una borrachera en una fiesta llena de excesos.

6. La muerte de Juan el Bautista es toda una tragedia. Se ha prestado para representaciones teatrales, películas, obras musicales. Se trata del asesinato de un hombre inocente de cualquier crimen, de un verdadero profeta, en la línea de los profetas del A.T., que lamentablemente corre con la misma suerte de la mayoría de los antiguos profetas. La vida y muerte de Juan son un ejemplo de vida recta, como debe ser la vida de todo creyente y de todo cristiano. El contraste entre Juan el Bautista y Herodes es toda una lección sobre lo que no debe ser nunca un mandatario ya que éstos están en ese lugar para lograr el bien de sus gobernados y, procurar siempre la justicia y la paz.


Rev. Edgar Moros Ruano

24 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

ความคิดเห็น


Iglesia Presbiteriana de Venezuela

Sínodo Nacional de la Iglesia Presbiteriana de Venezuela.

Calle Colegio Americano, Edificio de la Unidad Educativa Colegio Americano.

Altos de Las Minas, 1080. Baruta, Estado Miranda, Venezuela

Teléfono: 0212 944 53 26. Tel/Fax: (58 2) 943.35.29 y 945.08.08.

Correo electrónico: ipvsinodo@gmail.com

 

  • Icono social Instagram
  • Facebook Basic Black
  • Twitter Basic Black

© 2023 por Iglesia Presbiteriana de Venezuela. Creado con Wix.com

bottom of page