Amados hermanos en Cristo, en el pasaje de hoy, encontramos varios personajes Jesús, una gran multitud, los discípulos, un joven con cinco panes y dos peces, la barca, y el mar.
Jesús quería estar solo con sus discípulos de tranquilidad su Ministerio había comenzado en forma indetenible todo el que oía hablar de Jesús o presenciaba sus milagros le seguía debemos de recordar que en ese tiempo la movilización era en: camellos, caballos, mulas o burros y solo el que tenía recursos económicos era el que lo podía realizar, por lo tanto, los que seguían a Jesús eran los pobres, los necesitados, los enfermos, los excluido.
Por ellos cuando Jesús divisa nuevamente una gran multitud le dice a Felipe tenemos que comprar pan para toda esta gente a lo que Felipe le responde: ni con doscientos salarios que compremos en pan nos alcanzaría para darle un poco a ellos y es cuando Jesús manifiesta su amor de pronto aparece un joven traído por Andrés, hermano de Pedro con cinco panes de cebada y dos peces y le pregunta Jesús: ¿qué es esto para tanta gente? La palabra nos dice eran como cinco mil varones sin contar las mujeres y niños.
Jesús nos da ejemplo del poder de la oración en una forma muy sencilla tomo los panes y los peces y dio gracias a Dios lo repartió a sus discípulos y estos recostados en la hierba y podían comer cuanto querían, pero cuando tuvieran saciado, Jesús le dice a sus discípulos que recojan lo sobrante y se recogieron doce cestas esta fue una de las señales que vieron estos hombres para decir “ este verdaderamente es el profeta que debía de venir al mundo; por eso la multitud pensaba llevarse a Jesús para nombrarlo “REY”.
Llegada la noche desciende al mar entra en la barca e inicia el viaje hacia Capernaum estaba ya oscuro y Jesús no llego, cuando habían navegado unos veinticinco o treinta estadios se levantó una gran tormenta las olas pasaban sobre la barca y el viento soplaba de forma impetuosa de pronto ven a Jesús caminando sobre el agua y que se acerca donde ellos están y tuvieron miedo más Jesús les dijo: “YO SOY; no temáis. Ellos entonces lo con gusto lo recibieron en la barca la cual en seguida llego a tierra donde iban.
Hoy veintiocho se realizan elecciones presidenciales en nuestra amada tierra Venezuela, los pobres, los necesitados, los excluidos el pueblo todos una vez más colocan sus esperanzas en uno, tal o cual candidato, pongamos nuestra fe en el Jesús que nos enseñó a orar en forma sencilla dando gracias al Dios de los cielos y sin temor alguno demos nuestro sufragio Para que todos juntos llevemos a Venezuela a su destino mediante su voluntad, Solo Dios tiene la potestad de quitar Reyes y poner Reyes.
¡Adiós sea la Gloria ¡
Que el Dios todopoderoso nos bendiga y nos guarde y que Él tome una vez más el control de Venezuela.
AMEN
M.L. Lubin Marin
Comments