Lucas 16:1-13
Este texto bíblico es bien conocido, sin embargo, siempre aprendemos algo nuevo porque siempre su palabra nos confronta y nos inquieta, es por ello que te invito a que reflexionemos a la luz de cómo nos encontramos en este momento de nuestras vidas y como mejorar nuestra actitud ante Dios y ante aquellos que nos rodean, e incluso nos siguen.
Encontramos, que este hombre rico llamo al mayordomo y lo confronto por lo que había oído de él, que estaba disipando es decir desapareciendo poco a poco sus bienes, quizás por ser tan rico no se había dado cuenta de lo que estaba perdiendo, además que confiaba en el mayordomo, ya que cualquiera no tiene ese puesto o cargo a menos que sea de plena confianza, cosa que este hombre no valoro ni cuido.
También encontramos, que el hombre rico al pedirle que diera cuenta de su mayordomía y que quedaba sin empleo, el mayordomo se dio al descubierto, he inmediatamente en su mente ingenio un plan o estrategia, con el fin de no quedarse en la ruina o ser la burla de la gente después de haber ocupado un puesto o cargo de gran relevancia.
Vemos aquí que el hombre rico, alabo la sagacidad del mayordomo porque lo que debía hacer no hizo, sino que quiso ganar con riquezas injustas, con los más vulnerables, jugando para su propio bien. Esto me hace reflexionar si realmente amamos a Dios, Él nos ha colocado como mayordomos ante esta tierra, administrar las riquezas de su reino, sobre la naturaleza, nuestra familia, hermanos en la fe, etc., hemos tenido todo para administrarlo de la mejor manera, cuidándolo y disfrutándolo, es por ello que, si no somos fieles en lo poco, ¿cómo seremos fieles en lo mucho? Hemos sido injustos, la justicia clama por buenos y files mayordomos, íntegros en todos los sentidos, no solo justos para unas cosas y otras no. La justicia es justicia, el ser fiel es ser fiel en todo. Por lo tanto, el ser fiel es digno de confianza y la confianza trae bendición porque nos coloca en un lugar de honor.
Por lo tanto, la reflexión de hoy es decidir a quién vamos a escoger, ya que no podemos ser fieles a Dios y fiel al hombre , ser justos ante todo lo que nos rodea y cuidar de lo que Él nos ha regalado y ser injustos, ser mayordomos fieles y confiables delante de Dios o no, en nosotros esta la decisión, pero si escogemos ser fieles a Dios, ser justos y mayordomos fieles tendremos la mejor y mayor recompensa o bendición, seremos cristianos confiables, seremos reconocidos/as, en cualquier lugar por nuestras destrezas, confianza, fidelidad, colocándonos en un lugar de honor y privilegios.
La invitación que te hago hoy es, a que escojas ser un mayordomo fiel y confiable, cuida las riquezas del reino de Dios y su justicia y lo demás como dice su palabra, vendrá por añadidura.
Dios necesita de mayordomos fieles, ¿deseas serlo? Dios te bendiga en tu decisión escogiendo lo mejor. Bendiciones
Rev. Zulema García de Rojas
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